miércoles, 22 de diciembre de 2010

HAY QUE PASAR EL VERANO

El 29 de junio de 1959, el entonces Ministro de Economía de la Nación Alvaro Alsogaray lanzó por el canal 7-único canal de la televisión de entonces-una frase que se quedó para siempre: "hay que pasar el invierno".
Eran días de peronismo proscripto, de Frondizi presidente, de mucho frío, de protestas sociales y sindicales por doquier y del nefasto capitán-ingeniero haciendo de las suyas. Tras el invierno, aseguraba Alsogaray, las cosas en materia económica iban a mejorar. Tremenda sanata.

En los días que corren en Oberá, hay que reformular esa frase: "hay que pasar el verano".

Llegó el estío a la ciudad y con él un clásico: cortes de agua y luz.
¿Los motivos? Se saben. Ahora se saben. Quién provee de tales servicios, la CELO (Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá) dedicó tiempo y dinero a otras cosas en vez de dirigir los fondos a estas prioridades indiscutibles que son el agua y la luz. Entre las "otras cosas" se debe mencionar hasta una pintoresca "pileta termal experimental". Grotesco: en Oberá hay algunos que disfrutan de un "baño termal" al tiempo que otros-los prójimos según el argot cristiano-no tienen agua ni para pegarse una enjuagada en medio de un calor agobiante. Y agobiante en serio.

Años de mayoritaria indiferencia social, estimulada además por una prensa que blindó a Ewaldo Rindfleisch para que haga literalmente lo que quiso, lograron que la inversión que es imprescindible hacer a favor de ampliar y modernizar las vetustas redes de caños de agua y de tendido eléctrico-que se rompen por viejas y además no alcanzan para abastecer a todos en una ciudad que dejó de ser pueblo-ahora sea cosa de-a lo sumo-mediano plazo.

Se sabe. La realidad puede ser manipulada, escondida, negada. Pero llega.

Llegó. Y ahora es poco lo que se puede hacer en lo inmediato.

Excepto aguantarse. Y aprender-quizás-de la experiencia. Ser indiferente tampoco es gratis. Genera secuelas.

Ahora en Oberá, hay que pasar el verano.

lunes, 13 de diciembre de 2010

MI ENEMIGO FAVORITO

En 2004 se filmó un largometraje de origen chileno titulado "Mi mejor enemigo". El film, dirigido por el joven cineasta nacido en Viña del Mar Alex Bowen, mete la nariz en la casi guerra de 1978 entre las dictaduras de Chile y la de Argentina, para recrear las vivencias de un par de patrullas de soldados de ambos países en plena defensa de sus fronteras. Ahí en medio de la pampa se tejen relaciones entre ambos bandos. Quien oficia de cronista es Rodrigo Rojas, un conscripto chileno que percibe en carne propia el absurdo de la guerra.
Interesante el título. La jerarquización de los enemigos. La posibilidad de establecer un escalafon para ellos. Incluso, hasta poder elegirlos.

Los Kirchner tienen muchos enemigos. Tantos que podrían establecer un escalafón para ellos. Incluso, hasta elegir a su enemigo favorito.
Lo hicieron hace mucho.
El enemigo favorito es Mauricio Macri.

La retórica-diría Aristóteles-o la sanata-diría Fidel Pintos-que el oficialismo propaga a través de su inmensa red comunicacional necesita hacer de Macri su enemigo favorito. Explotar todos sus flancos "débiles". Su pobre oratoria. Su imágen de "niño bien". Ser representante de la "derecha" neoliberal. Millonario. Patrón. Cierta candidez política. Que si tiene bigote o se lo afeita. Si se casó una, dos o tres veces. Ser hincha de Boca (no es una debilidad sino una fortaleza, pero el fanatismo del fútbol ayuda más de lo pensado). Prestarse a juegos que él cree simpáticos (dejarse chicanear por los noteros temerosos del kirchnerismo del programa "CQC" o parodiar horriblemente mal a Freddie Mercury). Dejarse insultar por Aníbal Fernández sin responder en sintonía. Y gobernar Buenos Aires, el centro de resistencia político, social y cultural a esa parodia tan berreta del peronismo y del progresismo que es el kirchnerismo.

El kirchnerismo sanatea fervientemente en los medios de comunicación y en las calles con la redistribución de la riqueza-que empezó por ellos mismos y ahora faltaría que le llegue al pueblo-con irla de progres con sensibilidad social-aún llenos de plata y propiedades y viviendo en Puerto Madero-con revertir lo que pasó en los demonizados años noventa-no olvidar que un kirchnerista es antes que nada un ex menemista-con el modelo económico nacional y popular-que le pagó todito lo debido al FMI y ahora quiere pagarle todito lo debido al Club de París-con ir contra los intereses de la oligarquía-para reemplazarla por una oligarkía-con el combate a la pobreza-cinismo en estado puro.Sin pobres no tienen votos-. Con...la lista es larga.

Importar pobres para alojarlos en la Capital Federal. Votos a futuro y buena clientela para esmerilar al enemigo favorito con la sanata de la xenofobia. La opción progresista y sensible frente a la derecha neoliberal que "odia" a los desposeídos. La sanata de todos los días. La pereza mental de algunos que también sufragan hace el resto.

Mauricio Macri.
El enemigo favorito.