sábado, 26 de abril de 2014

QUE PAREZCA UN "ACCIDENTE"



    

      Cuidado con usar la palabra “accidente” para cualquier cosa.  La etimología del término nos dice que viene del latín “accidentis” que significa “lo que cae, lo que sucede ocasionalmente”. Provienen del verbo “cadere”, caer, de donde nace también la palabra “chance”. Todo muy ligado al azar, ¿cierto? 

     Tras la tragedia del puente Acaraguá, que se partió al medio dada la desidia gubernamental, el aparato de propaganda más algunos militantes sociales de la cobardía y el acomodo  han poblado el éter de la palabra “accidente”. Al tiempo que el titular de Vialidad provincial, un Julio Duarte tan proclive a hacerse el editorialista en los portales amigos, se borró olímpicamente. Como si nada.

     Dejame que te cuente sobre un potencial “accidente” que ojalá no suceda pero que, para que no ocurra, debe hacerse algo.  Y, a la manera de Acaraguá, no se está haciendo nada.

    Hace años que los padres de los alumnos de la Escuela 395, ubicada en el periférico barrio de Villa Martos en Oberá, viven con el “Jesús en la boca” porque chicos y chicas deben cruzar a diario por la ruta nacional 14 de manera inevitable para poder ir y volver del colegio. Esa vía, conocida nada menos que como “la ruta de la muerte”, es el lugar perfecto para que alguno de esos automovilistas que apretan el acelerador en su auto y el freno en su cerebro, atropelle a alguno de los estudiantes. Han pedido la construcción de un puente peatonal. Algo que ponga a sus hijos a resguardo de esa clase de conductores. Al mediodía, cuando salen, suele haber inspectores controlando. Pero a la mañana, cuando entran, no hay nadie. Y en el medio de ese tiempo tampoco. Lo pidieron bien, como debe ser y como nos dicen que debe ser. Los por entonces diputados nacionales Ramón Puerta y Alberto Asseff,  se hicieron eco y pidieron a la Cámara Baja que “solicite al Poder Ejecutivo Nacional para que a través del Ministerio de Planificación Federal y del Ministerio de Economía se incorpore en el Presupuesto general de la Administración Nacional para el período 2014, la partida presupuestaria para la ejecución de un puente peatonal sobre la ruta nacional 14…” frente a la mencionada escuela obereña.

      Nación no respondió. Claro. Misiones representa pocos votos.

      Los padres y vecinos recurrieron al municipio donde viven. Les dijeron que dado que es una ruta “nacional” es un problema “nacional”. No te sorprendas. Los que manejan Oberá han contestado cosas peores.

    Impecable el accionar ciudadano de esta gente. No cortaron rutas, no cortaron calles, no patotearon a nadie. Pero, ¿y del otro lado?

     ¿Qué hace un ciudadano en problemas cuándo el Estado en cualquiera de sus formas se ausenta? 

     Si se desesperan y cortan rutas el canallesco aparato de propaganda no dudará en tildarlos, a ellos, de “delincuentes”.

     Si van a la Justicia…, bueno, ni hace falta que lo escriba.

     Si no hacen más nada dependerán exclusivamente de Dios. Que hasta acá ya los cuidó bastante. Como decía San Agustín: “Señor vos ocupate de lo imposible que de lo posible me ocupo yo”. Pero está visto que algunos no se ocupan ni de lo posible.

     Un día, quizás, suceda que a un chico lo atropellen en la ruta nacional 14, camino a la Escuela 395 de Villa Martos en Oberá.

     Y entonces no va a faltar algún  gusano que te cuente que se trató de un “accidente”…



    
    

miércoles, 16 de abril de 2014

UN VERON INDISPENSABLE

        


       Eliseo Verón tuvo éxito en su “causa sui”. Causa sui” es la otra manera que tenía el pensador norteamericano Ernest Becker (1924-1974) de referirse al “proyecto de inmortalidad” que cada persona tiene. Becker sostenía que a través del “heroísmo” , entendido como el encontrar algo que trascienda la muerte física, el hombre consigue darle un significado a su vida, siente que su paso por este mundo tuvo un propósito. Por cierto que Eliseo Verón, sociólogo, antropólogo e indudable arquitecto de la entronización de la Semiótica en la enseñanza vernácula de las ciencias sociales, lo logró.

     Murió de un cáncer de garganta y el aparato de propaganda kirchnerista se encargó de mojar su tierra para convertirla en barro ya que en los últimos años Verón “osó” criticar al gobierno desde un lugar que para esta gente es como la kryptonita para Súperman: el conocimiento. Se opuso a la ley de medios y hasta apoyó al grupo “Clarín” en el cual trabajó desde los noventa. Pero a ver si lo decimos de una vez: en ésta época de devaluación de la palabra “intelectual” (véase la fantochada del grupo “Carta Abierta”) Eliseo Verón fue uno en serio. De los de verdad.

    No se nos ocurre como se la puede ir de periodista y desconocer sus ideas. Su teoría de la “Semiosis social” es indispensable en el ejercicio de la profesión y en la enseñanza de la profesión. ¿Cómo era aquello que estudiábamos en Ciencias de la Comunicación?

      En el marco de la Semiótica (la disciplina que estudia la interpretación y producción de sentido) Eliseo Verón, estudiando los modos en que le damos sentido a algo,  plantea que la teoría de los discursos descansa en una doble hipótesis:

 a) Toda producción de sentido es necesariamente social: no se puede describir ni explicar satisfactoriamente un proceso significante, sin explicar sus condiciones sociales productivas.

b) Todo fenómeno social es un proceso de producción de sentido.

    Si bien se cuidaba de marcar lo heterogéneo de una sociedad, planteaba que era en la semiosis donde se construye la realidad de lo social. La semiosis es cualquier forma de actividad o conducta que involucre al signo. Un signo es el resultado de la relación entre un símbolo (por ejemplo una palabra) y la idea que en nuestra mente se genera a partir de esa palabra. El signo produce significado.

    Por supuesto que ésto es más complejo pero ahora importa marcar la relevancia del autor por sobre la profundización de su obra.

     La obra de Verón es rica en cantidad y calidad. Pero te reitero que sus funerales serán planificadamente opacados. No lo van a velar en el Congreso. Tampoco Cristina lo va a mencionar por cadena nacional. Es que enseñaba a pensar, no a pensar como él, que no es lo mismo.

      Se fue Eliseo Verón después de hacer de las suyas.
      Ayudándonos.
      A hacer de las nuestras…


domingo, 13 de abril de 2014

INSTRUCCIONES PARA DEBATIR CON UN KIRCHNERISTA

    


     Cristina Fernández de Kirchner dijo públicamente que “el kirchnerismo es un fenómeno difícil de explicar”. Tiene razón. No es sencillo y hasta resulta agotador intentar razonar con saltimbanquis que, si su patrona lo ordena, defienden el ser de River con pasión. La misma pasión con la que defienden, si su patrona cambia las órdenes y por cierto que las cambia seguido, el ser de Boca.

      El kirchnerista promedio vive de morder la carne del hueso que le tiraron (puesto público, pauta oficial, negocio privado con la obra pública, subsidio, planes sociales, etc.). Por eso, cuando le atacan al amo te salta como un perro al cuello. Esa es la primera cosa que tenés que saber si vas a debatir con un “k”: el tipo (o la tipa) va a entrar mal. Agresivo, la génesis de su discurso no será la argumentación sino la descalificación. Buscará etiquetarte enseguida según el conjunto de etiquetas que le dieron. Vos tenés que ser sí o sí un “gorila”, un “cipayo”, un fanático de “Clarín”, un “neoliberal”, un radical de la alianza, un zurdito que simpatiza con líderes sin votos, un burgués derechista, un “facho”, un menemista, un duhaldista, un nostálgico de la dictadura o un reverendo desagradecido. Para ellos no hay vida por afuera de éstas categorías.

     A ésa altura entraste en su juego. El núcleo del debate ya no será la gestión del gobierno sino vos. Si te mantenés más o menos calmo y replicás con inteligencia, te va a insultar de alguna manera. No importa si sos un honesto ciudadano que propone contrastar ideas. Te va a llevar a un lugar en el que manifestés algún indicio de algo que le permita colocarte alguna de las etiquetas que te mencioné. No te prestés a ninguna manipulación . Replicá con argumentos sólidos, básicamente aquellos que evoquen la verdadera relación de los Kirchner con la dictadura de Videla, como se enriquecieron con la Circular 1050 de Martínez de Hoz, o el apego que el matrimonio tenía por Menem y Cavallo . Si empieza con el discurso anticlarín berreta seguí rebatiéndolo con la verdad, que para un kirchnerista es como la kriptonita para Súperman.

      Demostrale que estás bien empapado en temas como la fusión “Cablevisión-Multicanal” que firmaron Néstor y Moreno. Si te salta con el verso de que Néstor tranzó con el grupo porque tenía solo el 22% de los votos y necesitaba construir Poder, hacé tu jugada moviéndolo a la fecha del 7 de diciembre de 2007: ése día Néstor convirtió a “Clarín” en monopolio de la tv por cable y para entonces estaba a tres días de colocarle la banda presidencial a su esposa Cristina, ungida cuarenta días antes con el 45% de los sufragios. Jaque mate!

      Si el debate es oral y cara a cara un kirchnerista jamás escucha. Va a elevar su tono de voz para imponerse a la tuya y no dejará de interrumpirte mientras vos expongas lo tuyo. Cuenta con que el civilizado siempre seas vos y entonces sí, a diferencia de él, lo escuchés con atención. ¿Qué tenés qué hacer? Interrumpilo vos también con estiletazos verbales del tipo “¿para vos la inflación es del 0,8%?. Eso lo va a descolocar.

      Si el debate es por una red social, supongamos Facebook, enseguida aparecerán sus “compañeros” y te vas a sentir tan acorralado como el General Custer ante miles de sioux. Hasta que lleguen tus refuerzos (la Caballería, ergo, algún otro ciudadano crítico), enfócate en un sioux hasta masacrarlo sin importar las flechas que te tiran los otros. Cuando vean tu poder de fuego quedarán perplejos y dejarán de escribir. Los “K” también son impresionables.

      Si tu oponente es funcionario sacále jugo a esa condición. Cuando se es funcionario público no hay que pedir explicaciones. Hay que darlas.

      Si te corre con el curro argumentativo de que pertenecés a sectores destituyentes refréscale la memoria indicándole que fue Cristina Kirchner senadora nacional y en 2001 la que pidió que renuncie el Presidente De la Rúa. Está publicado en “Página 12”. Página 12!

      Si el fulano o la mengana repite una y otra vez el cd del “modelo inclusivo” sacale partido a vivir en Misiones. Según el Censo de 2010, seis de cada diez habitantes de la provincia no tienen acceso al agua potable y carecen de cloacas. Vivir así después de una “década ganada” hace que el argumento de la supuesta mejor calidad de vida se autodestruya como la cinta con instrucciones de “Misión imposible”.

      Si te quejás de la inseguridad, a la sexta o séptima vez que te trató de fascista (aunque el ignorante crea que Mussolini es un Concejal Renovador de Garupá), decile que estás de acuerdo con bajar la edad de imputabilidad a los menores. Cuándo te pregunte si esa idea la sacaste de Ramón Camps, respondele que la sacaste de otro: un tal Martín Insaurralde.

      Cuándo vaya por el lado de la sacralización de “El” y pretenda emularlo a Perón, Churchill o Ghandi, atiná sólo a reírte. Eso se refuta sólo y hasta le pone un tono jocoso al debate.

      Vías de contraataque: Aníbal Fernández y la “sensación de inseguridad”, Etchegaray-titular de la AFIP- comprándole a la hija un auto importado, Boudou y su pasado en la UCEDE (el partido de un “gorila” en serio: Alvaro Alsogaray y de paso explicale quién fue), el Estado bancando al fútbol en un país de niños que carecen de ácido fólico, el apoyo decidido a señores feudales como Gildo Insfrán en Formosa, José Alperovich en Tucumán o Carlos Rovira en Misiones (“ël” fue a Posadas a apoyar la re-re de Rovira que luego el pueblo rechazó en las urnas), o la señora diciendo en Harvard que su patrimonio aumentó porque es una “exitosa abogada” (planteale que el incremento patrimonial se deduce de las propias declaraciones juradas de Cristina y que te llama la atención que siga pleiteando y ganando dinero como abogada mientras ejerce como Presidente).

      Quizás aparezca un “k” con cierta formación (cuidado! Don Miguel de Unamuno advertía que “un tonto ilustrado es más peligroso que un simple tonto”). Es el “k” más vulnerable: su intelecto lo va a llevar a prenderse en el cotejo de ideas, lo que lo llevará hacia la búsqueda de la verdad, que como enseño Aristóteles-y otro más-es la realidad. Bueno, si ya están en el nivel de aceptación de la realidad y búsqueda de la certeza, dejalo que hable sólo. Cuál almeja, se enterrará con la lengua


      Recordá que así como vos tenés derecho a pensar como pensás un kirchnerista tiene derecho a serlo. No lo odiés. No permitas que te falte el respeto pero tampoco se lo faltés vos a él. Y que la única fecha de vencimiento de Cristina en la Presidencia lo establece la Constitución Nacional: 10 de diciembre de 2015. Te digo ésto para que no te comás al antropófago.


      Oscar Wilde nos enseñó que “una máscara nos dice más que una cara”.

      Cuándo un kirchnerista te muestre una de sus muchas máscaras ya sabés lo que tenés que hacer.

      Sacásela!

jueves, 10 de abril de 2014

AUSENCIA DE REFLEXION

 




       

     “Todo envejece en mí. Menos, mi capacidad para el asombro”, escribió el genial Gilbert Keith Chesterton. Mi asombro de hoy consiste en tu falta de asombro.

      Me pregunto que pasaría si se les pudiera colocar a las noticias una suerte de “lomo de burro” que obligue a sus consumidores a detenerse para examinarlas, para contextualizarlas, para reflexionar sobre ellas. La velocidad de la transmisión de los sucesos contribuye y mucho, paradojalmente, a la pereza mental. El gran público recibe cantidad de información que no suele procesar. Así, cualquiera se informa con crónicas berretas cuyo único mérito es su capacidad de llegada. Escucho la radio que mejor sintoniza la señal (no sea cosa que deba esforzarme en girar el dial y buscar otra). Veo el canal de TV que me llega. Leo este diario porque es gratis. Hegel nos enseñó que la síntesis es buena como resultado del contraste de la tesis y la antítesis, no como mecanismo de evasión de la reflexión. La excelencia, en todo, no llega sola, hay que buscarla. Y se la busca muy poco.

     Es difícil detectar asombro en las personas. Al menos uno que estimule  la necesaria pausa para utilizar el bendito músculo que nos diferencia a los animales de dos patas de los de cuatro. No se puede absorver de la misma manera un asesinato, una violación o un caso claro de corrupción gubernamental que un gol de Gigliotti, los tambaleos de la relación entre Jorge Rial y la “Niña Loly” o el pronóstico del tiempo.

     Reflexionar supone relacionar. Relacionar ideas con otras, textos con contextos, consecuencias con causas. Armar un archivo imaginario que permita seguir los sucesos para ordenarlos en un todo coherente. Será el ejercicio del pensamiento crítico lo que permita entonces “desordenar”, tornar caótico ese universo compuesto por tanta data. No puede seguir sucediendo que a algunos televidentes, oyentes o lectores se les deba hablar cada día como si fuera la primera vez. Como si la información que recibieron hoy durara solo lo que hoy y mañana será olvidada.

     Se podrá especular con que la capacidad de asombro es un hecho más bien espiritual que racional. No es cierto.  El cuerpo no se mueve si primero la cabeza no se conmueve.
     Subalternizar hechos verdaderamente dramáticos hasta tornarlos “naturales” y ordinarios ha constituído una victoria por KOT del Poder. ¿Cuántos se asombran hoy, convirtiendo ese pasmo en reflexión, ante hechos alevosos de corrupción? La indignación propia de una cierta época ante la falta de ética se reconvirtió en el cliché “En política todos roban”. ¿Todos roban quiere decir que,si tuvieras la oportunidad, vos también? 

     El mal humor social, la protesta cotidiana, la queja mediática no se traduce en votos. Como si hiciera falta que el día del comicio hubiera que recordarle uno por uno a los votantes aquella queja que fue suya, que se hizo nuestra y que parecía de todos. Difícilmente una persona decida un cambio ante esa estupenda oportunidad que dan  las urnas si primero no internalizó que no todo es lo mismo y que no todo lo que sucede ocurre por normal. Mucho menos si su alma ya no reconoce estupor ante la desgracia ajena precisamente porque es ajena. Y menos aún si la información es absorbida como quién traga sin masticar. Cotiza en bolsa la pretensión de dar explicaciones superficiales para hechos profundos favoreciendo a las mentiras más caraduras.

     La imposibilidad de detenerse a pensar el mundo que nos rodea es una impotencia madre. Como Cristina. Madre de todos. Deberían tener muy en cuenta los dirigentes de la oposición política, cuando van a pedir el voto, a qué clase de gente se lo están pidiendo. Qué nivel de información tienen, con quién y con qué se informan y que están dispuestos a hacer ahora que saben lo que no sabían si es que lo saben y lo saben bien. Los dirigentes no escarban en ésto y así les va. Hace diez años que los mismos de siempre construyen  la Política y ellos apenas que la comentan.

     Sin capacidad de asombro no hay rebeldía. Sin rebeldía no hay lucha por la evolución. Sin evolución se cambia de tirano pero nunca de tiranía.

     Y no se crea Política.
     Sólo se la comenta.



    
    

ASESINADA POR NADIE



     



     Oberá es una ciudad en donde la gente olvida rápido. Puede que hayan  olvidado entonces que el jueves 17 de abril se cumplirán diez años de la muerte de María Elena “Marilyn” Bárbaro. Oficialmente y al día de hoy, asesinada por nadie.
     Pasó una década entera de aquél sábado en el que extinguieron la dura vida de esta mujer discapacitada que tenía 54 otoños y que en el 2004 vivió el último. Como no podía ser de otra manera en ésta Misiones  casi todos los acusados quedaron libres de culpa y cargo. Uno solito de los cinco, Rubén Schming,  quedó supeditado a la causa pero fue excarcelado bajo caución en enero de 2011 y aún espera fecha para el juicio oral. ¿Entendiste? Aún espera fecha para el juicio oral.
     A Marilyn la mataron con una alevosía de esas que se ven guionadas en una película. Luego, para hacer una injusticia bien hecha, todo el proceso judicial fue un mamarracho al que va a costar mucho empardar .
     ¿Dónde estará ahora?  Ella, digo. ¿Dónde estará? Nos asalta una cristiana duda. ¿Tendrá paz? ¿Conocerá la verdad? ¿Tendrá sed de justicia?  No lo sabemos y entonces no nos queda otra que dejar las respuestas libradas al tamaño de nuestra fe. Pero, racionalmente,  debe ser horrible que te maten dos veces. Una con golpes. La otra con impunidad.
     Su hermana Juana, o “Ticha”, solía convocar a marchas mensuales pidiendo una Justicia que todos sabemos no va a recibir. Es que debe enfrentar a una mayoría de vasallos que vota siempre por el amo. Qué cosa con Oberá! Tantas iglesias y ni una pizca de remordimiento.
     No voy a escribir mucho más. Se me acaba el papel.
     Solo dejame decirte que Marcel Proust nos enseñó que “uno se vuelve moral cuando es desdichado”.
     Horrible sería verte caer en la desdicha.
     Y que todos te olvidemos…