viernes, 24 de mayo de 2013

TEMPORADA DE CAZA...BOBOS

  





A las siete de la tarde del  lunes 20 de mayo de 2013 el Frente Renovador de la Concordia (simulada) volvió a lanzarse a hacer lo que mejor le sale: cazar bobos.

     Con diez años de exitosa experiencia en el rubro, Carlos Rovira y Maurice Closs (en ese orden) dieron a conocer públicamente la lista de candidatos a diputados provinciales, más los aspirantes  a concejales de los siete municipios que renovarán su propio legislativo, de cara a los comicios del 30 de junio.
     ¿Por qué “bobos”?  En la última década Rovira se hizo  (mega) millonario y Closs, a través de su empresa familiar,  se lleva el setenta por ciento del dinero que deja cada turista que visita las Cataratas del Iguazú.  Sacaron al Fiscal de Estado que podía investigarlos  para poner a otro que ni mamado lo haría. Rovira colocó como titular del Superior Tribunal de Justicia-nada menos-a su maestra de grado que se recibió de abogada ya muy grande y fue impuesta por encima de decenas de abogados cuya trayectoria los avalaba para el mismo cargo. Mediante el apriete que permite el manejo de la “caja”  hicieron de los 75 municipios un armado monocolor. La Legislatura de la provincia es un vago recuerdo de lo que debería seguir siendo: un Poder (otro) del Estado que controle a los demás. La impunidad se pasea victoriosa desde Apóstoles a Bernardo de Irigoyen (ver caso “Marilyn Bárbaro”). Lograron que el democrático hábito de decir lo que uno piensa ahora sea un acto de coraje. Por si en la Argentina hicieran falta más, transformaron a la hermosa Misiones en otro feudo en el que la ley no es otra cosa que la voluntad del que gobierna.
      Y todo con el fenomenal aval en las urnas de uno de los pueblos cuyos salarios son de los más paupérrimos del país, seis de cada diez habitantes no tienen acceso al agua potable y lo que cagan otros seis de cada diez lo tienen que tirar al pasto porque en pleno siglo XXI no saben lo que es tener una cloaca (datos surgidos del Censo Nacional de Población 2010).
     ¿Cómo los llamarías  vos?

     Ahí lo veo a Passalacqua con el rifle de aire comprimido. Y también lo veo a Rindfleisch. Que la reforma del centro de la ciudad de Oberá (producto de un negociado urbano y no de una planificación urbana), que hacer una Cuarta Comisaría (en vez de arreglar las comisarías que están de cuarta). 
      Y las represas (orden de “Ella”  y un beneficio para Buenos Aires y para Brasil que los misioneros ni van a oler) que van a traer más trabajo, obras y salud pública y….ja ja ja ja  ja ja.  Disculpáme.  Me tenté.
     “La ignorancia es la fuerza” era el lema del “Partido Unico” en la fabulosa “1984” de George Orwell.
       Cuidado señora.  Son cuarenta días hasta las elecciones.
       Estamos en temporada de caza.
        De caza…bobos.
     

lunes, 20 de mayo de 2013

DIEZ AÑOS DE SOLEDAD

                    

                   

     ¿Viste que ahora habla cualquier gil?  Tenía razón Víctor Hugo (el célebre autor de “Los miserables”, no el ahora relator miserable) cuando dijo que “No existe en el mundo nada más poderoso que una idea a la que le llegó su tiempo”.  



     Ahora son unos cuántos los que dicen o que saben o que dicen que saben que, por ejemplo,  los Kirchner se enriquecieron con la dictadura militar. Que hasta se acuerdan del numerito de cuatro cifras de la Circular de Martínez de Hoz (“la 1050”) que tanto le sirvió al matrimonio para aumentar su patrimonio.  Saben que Rovira es un déspota y que Closs llegó al Estado para servirse. Saben que la “Renovación” se formó para hacer negocios. Saben que Rindfleisch pasó de tener una mueblería, al tiempo que el papá vendía chorizos, a hacerse (mega) millonario. Saben que la CELO es una suerte de “Caja de Pandora”  que, al abrirla…Saben que la Ley de Medios la pergeñaron para armarse éste fenomenal aparato de propaganda que tienen. Saben que la Educación, con ese absurdo  de ir quitándole exigencia,  está en el suelo y que con netbooks no la mejorás. Saben que sin Justicia no hay Democracia. Saben que no te podés quedar en el Poder mucho tiempo porque sino abusás del Poder. Ahora se indignan porque cómo vas a tener Termas sino tenés agua potable. Cayeron en la cuenta de que la inseguridad no era “una sensación” ni siquiera en Oberá. Que en una República los controles son fundamentales. Que el Periodismo es crítico y sino es Propaganda. Que con éstos tipos la corrupción y el autoritarismo no son la excepción sino la regla. Que…Que ahora son unos cuántos los que  saben.

     Mirá si el despertar general hubiera llegado antes. Antes de votar  a Cristina dos veces. Antes de votar a Closs, también dos veces. Antes de votar a don “Tito” tres! veces. Antes de no ir a votar a la CELO ni una sola vez.

      Es como decía el personaje de la película de Sergio Renán (“Sentimental”, 1981): “Tengo una moral de mierda. No soy ni derecho del todo ni torcido del todo. Es una moral de mierda”. Como con Menem en los noventa, mientras había guita (o eso parecía teniendo en cuenta que cuesta defender la certeza de que alguna vez un peso haya valido, en serio,  igual que un dólar), eso de la corrupción no importaba mucho para la mayoría de la burguesía nacional. Que anduviera en la Ferrari, que bailara con “Yuyito”, que jugara con Maradona y hasta que se animara al básquet, que total “Carlitos” era alto (y de ojos azules).  Después del “tequilazo” de 1997, sí. Ataque de dignidad general.

     “Se gual”, decía “Minguito”. Al matrimonio se le dejó hacer y deshacer a su gusto. Empezando por “Clarín” allá por 2003 y hasta el 2008, cuándo eran socios y la “corpo” logró que Néstor (Kirchner) y Guillermo (Moreno) le dieran el monopolio del cable y le ampliaran las licencias de radio y televisión por una década más (ah!, ¿no sabías? Sí, ahora sabés).  A cambio los periodistas del medio mucho la nariz en Santa Cruz no la metían (quizás porque allá hace muuuucho frío). FOPEA (el Foro de Periodismo Argentino) jugaba como la “Vieja” Reinoso en el Independiente de los años ochenta: en el medio sin complicar atrás y sin crear peligro adelante.  Dejaron crecer  a “Frankenstein”, que ya sabés a quién se le puso en contra en la novela de Mary Shelley.  Ahora ya sabés.


     En Misiones estaba de moda la fábula  de “la nueva política”. Que venía a acabar con los vicios de la “vieja política”.  Sería un cuentito pero se lo tragaron desde Apóstoles hasta Iguazú. Sacaron al fiscal Wickstrom, a la Jueza Catella , compraron intendentes y opositores, se quedaron con una Cámara de Representantes monocolor, hicieron de Canal 12 un eco de su propia voz, la Obra Pública se hizo la gran “caja”  y  a casi nadie le molestaba mucho todo eso. ¡Deben  ser asuntos de la “nueva” política!  , pensé. 


     En Oberá, de don Tito no hablaba nadie-. Para criticarlo, digo. Y pobre del que quisiera hacerlo, no le daban ni cinco de micrófono. No lo criticaba  “El Territorio” (bueno, no había Facebook), ni “La Radio Indispensable”. Es que el hombre había venido a salvar a la ciudad del Demonio “Rolo” (imagínate: peronista y de Campo Ramón. Que postrante!). No se hablaba de la “Masacre de 1936”. Fijate lo tabú que sería ese tema que hasta don Tito mandó a tapar el mural de la ex terminal.  Después sí. Los muchachos de la comunicación alternativa hicieron un documental y el invitado de honor fue ¡Don Tito!.  Sobre la CELO el discurso crítico era bien marginal. Hablaban diez tipos de los cuáles cinco, después,  se pasaron de bando, ja ja  ja ja ja . Y las Termas, orgullo obereño decía Don Tony (el que ahora escucha a todos). 

     Debe ser hermoso gozar de una libertad de expresión por la que pelearon otros!  

      Si la corrupción y el atropello hubieran molestado igual aunque el bolsillo estuviera lleno.  Si se hubiera empezado a hacer Periodismo mucho antes. Si los dinerales del superávit  fiscal hubieran ido, por exigencia nuestra,  a Salud, Educación, Seguridad, Justicia y a crear pleno empleo en vez de ir a parar a unas bóvedas. ¿Podés imaginarte la Argentina, la Misiones, la Oberá que serían hoy?

    Qué solitos estábamos los que hacíamos Periodismo . Aunque ahora me quieren contar que éramos más. Discúlpenme, tal vez sea cierto, pero yo no los recuerdo.

      “Siempre hay que decir la verdad. Y especialmente cuando no conviene”, señalaba Don Miguel de Unamuno.
      Ahora, cuando  para algunas cosas ya es tarde.
      Ahora , habla cualquier gil…


miércoles, 15 de mayo de 2013

EL SILVERSTONE QUE SE PERDIERON

  

 Cuando sos periodista conocés mucha gente. Todo el tiempo. Gente que tiene Poder. Gente que tuvo Poder. Gente que quisiera tener Poder. Gente estupenda. Gente miserable.  Intelectuales.  Medio pelos.  Ignorantes. Lo que sea. Conocés mucha gente.
      Ser periodista, estudiar  Ciencias de la Comunicación en la UBA (Universidad de Buenos Aires) y haber sido estimulado por mi viejo para sacarle jugo al entrañable ambiente cultural porteño fueron cuestiones  que, sumadas, me permitieron tutearme con tipos intelectualmente brillantes. En la academia , en los bares y en la calle. Pero creéme que lo de Silverstone no lo ví nunca.
 
     Roberto Silverstone apareció un día, creo que era a fines del 2005, por la vieja sede de FM Centro de Oberá en la esquina de España y Peñaloza. Amigo de la casa, dijo sentir curiosidad por las cosas que decíamos al aire en los comienzos  del programa  “Mejor hablar de ciertas cosas”, cuando lo hacíamos con Oscar Martín, Juan Wells, “Rafa” (el operador de sonido de entonces)  y Marielita Duarte Burgos. Después se sumaría uno de los periodistas con más “estaño” (leer a Jauretche)  de la provincia: Pepe Tarditti.  
     Eran los días en que  “Cuentas claras”  dejaba de jugar sólo en el éter local y pasaba a la inédita situación de tener competencia. Frente a esa suerte de “6,7,8 de Rindfleisch”  que era por entonces ese programa , oir críticas al “hermano” Rindfleich (que había venido a salvar a Oberá del “demonio” Rolo), o a Rovira (mediáticamente “intocable “ por entonces)  o al matrimonio Kirchner era toda una  novedad para muchos Y argumentar las críticas apelando a las enseñanzas de Unamuno, Aristóteles, George Orwell, Spinoza, Montesquieu  ó Lord Acton era atrayente para un hombre como Silverstone,  con tanto para decir y con nadie a quién decírselo.
     Durante ocho años, al menos una vez por semana, Silverstone engalanó el éter obereño hablando de lo que uno le propusiera y sin previo aviso. Ahí, en el estudio de Centro y después de FM Oxígeno Roberto ha disertado con profundo conocimiento sobre Historia, Música, Geografía, Economía, Literatura, Cine, Radio, Televisión, Cantantes, Orquestas, Política internacional, nacional y local, Biografías, Turismo, Deportes, Mujeres, Autos, Actualidad, Futuro y sobre casi cualquier cosa con entidad. La repercusión mediática fue notable y su prestigio se elevó, justicieramente, por las nubes.
 
     Pero no lo votaron. Hace un par de años, en 2011, Siverstone se presentó como primer candidato a Concejal de la ciudad por el sublema de la Unión Cívica Radical que postulaba a otro Roberto (“Nene” Vega) como alcalde.  Recorrió todos los medios, habló con claridad y profundidad sobre los temas candentes de la ciudad. Hizo propuestas serias.
 
      SIlverstone sacó un poco más de 700 votos y no entró en el quinteto electo para ocupar las bancas del legislativo.

       A la manera de un cliché, la “gente” suele decir que los partidos políticos (en especial, dicen , los partidos políticos opositores) muestran candidatos impresentables.  La “gente” dice querer candidatos nuevos que no estén “quemados” por el devenir de años ocupando o intentando ocupar cargos, personas intelectualmente formadas y con ideas, personas honestas que vivan de su trabajo y no de la política, en fin tipos a los que se pueda votar.
 
     SIlverstone sacó un poco más de 700 votos y no entró en el quinteto electo para ocupar las bancas del legislativo (?)
 
      Obereño, treinta años de docente formando y abriendo la cabeza de generaciones, vive de su “laburo”, lo que tiene se lo ganó honestamente e intelectualmente  (dicho con todo respeto) los cinco ediles actuales, todos juntos, a él no pueden ni atarle el cordón de los zapatones negros que usa.
 
     Uno lo disfruta como amigo. Y todos como columnista del programa. Pero se lo perdieron como Concejal.
 
     Salvo un premio “Cacique Oberá” que la municipalidad local le dio porque ya era imposible no darle nada,  Silverstone  no pertenece al pequeño, mediocre y ambiguo circuito cultural de Oberá. Es que el muy tozudo insiste con usar su lengua para proclamar sus verdades amargas por fuera y dulces por dentro en vez de direccionarla a los trastes de los que ejercen el Poder. En la Oberá de hoy no se pertenece al ambiente  cultural  oficial si primero no se es un “Tartufo”  (leer a Moliere).
 
     “El carácter es el destino”, escribió Heráclito de Efeso hace dos mil quinientos años.
       La mayoría de los obereños no consiguen perder el miedo.
       Por eso, pierden todo lo demás.

martes, 14 de mayo de 2013

ELOGIO DE LA REPREGUNTA

         

       “El Periodismo nace en la repregunta”
                               (Fermín Bocos, periodista español)



       
          La Escuela de la Gestalt (de la “forma”) es una corriente de pensamiento en el campo de la Psicología, surgida en Alemania a principios del siglo XX. Sostenían la teoría de que lo que percibimos son conjuntos organizados de sensaciones y no entidades dispersas sin elaborar.  Es indudable que hoy por hoy la batalla política se da en el campo de la interpretación. En el plano de lo simbólico, en el mundo de la palabra y la lucha por apropiarse del sentido. Por eso tanto interés oficial en controlar al periodismo. Periodismo que para sobrevivir y para distinguirse de “chupamedias”, alcahuetes, tranzas  y otras yerbas con las que se convive debe usar sus mejores recursos.

       La repregunta es un recurso fundamental del periodista.  En Oberá, sin embargo, escucharla es tan exótico como ver a River Plate levantando una Copa Libertadores en Brasil. 
              Casi no pasa día sin que buena parte de las radios o la televisión obereña  (incluída alguna  televisión obereña que se hace en Posadas)  nos  meta en la densidad de cuestionarios momificados. Reportajes ideales para el consumo de oyentes hipertensos: no tienen “sal”.
             Algunos dicen que la ausencia de la repregunta a los funcionarios públicos-fundamentalmente- es hija de la obsecuencia. Algo de eso hay pero también está ligada a la inhabilidad militante.  Esa que se origina en no cuestionar lo obvio, cuando sabemos que lo obvio es enemigo de la inteligencia. Es como si el periodista enviara un mensaje  desde cierta soberbia amortiguada y disfrazada por el medio tono campechano de la geografía: “Yo soy así. Y no pienso cambiar”.  Quiere decir que no va a gastar energía en mejorar y autosuperarse.  En leer. En cultivarse intelectualmente. En  desarrollar habilidades paridas en la posesión de una buena cultura general. En agregar contenido a las formas. Ser uno mismo y tener convicciones es algo muy distinto de jactarse de no saber. Es una verdadera tragedia humana cuando no se evoluciona no por ser limitado sino por ser perezoso.
      La consecuencia directa de la falta de repreguntas es la aparición de un grupo homogéneo de políticos que se sienten incómodos ante el ejercicio más o menos serio de la profesión. Les cuesta entender  que un reportaje periodístico no es “un menú a la carta” para que ellos se sirvan cuando todas sus experiencias mediáticas tienen que ver con sentarse frente a “ponemicrófonos”  para los cuáles es lo mismo el Periodismo y la Propaganda.  Muchas veces por pauta oficial, sí. Otras muchas , insistimos, por carencias. Hay que entrenar para ser inteligente. Después, lo de ser incisivo viene sólo.
      En Oberá el Poder muere ante la repregunta. El Intendente, los Concejales, los que administran la CELO, dirigentes políticos de cualquier orientación, pueden llegar a sufrir ataques de pánico ante la contundencia y profundidad de la sencillez que es la “composición química”  de la repregunta: contundencia, profundidad  y sencillez.
     Oberá también tiene un “relato”. Y en vista de que hasta acá llegamos sin agua, sin luz, con salarios miserables, con un Hospital que precisa mucho de lo que ofrece y una corruptela que ameritaría haber construido sus propias bóvedas , hay que asumir que el único antídoto para combatirlo es desarmar esos aburridos monólogos que surgen como respuestas preconcebidas a preguntas  elementales . Se me hace, ante algunas entrevistas que hay por ahí, que mi tía  de Pompeya sería más incisiva.
     Marcar la ausencia de la repregunta en los mass-media de Oberá no tiene que ver solamente con detenerse en el amateurismo de algunos profesionales. Va más allá.  Un periodismo limitado estimula que haya  más habitantes que ciudadanos.  Habitantes que al caer en la trampa de la sanata  no pueden  deconstruir  creencias incorrectas (no sólo en lo político)  ni refutar puntos de vista que tienen una fuerza que les viene no de la argumentación sino de la constante repetición. Una persona mal informada carece de la necesaria Educación Cívica. Una persona mal informada cae en el exceso de reverencia ante los funcionarios. Una persona mal informada toma malas decisiones. Por ejemplo, al votar. 

     “Con la verdad no temo ni ofendo”, escribió José Gervasio de Artigas.
       Con la repregunta, tampoco.
    
     
    
                      
                 

miércoles, 8 de mayo de 2013

¿SABIAS QUE NO TE PUEDEN RETENER EL AUTO O LA MOTO POR CUALQUIER FALTA?







     En la antigua Grecia se usaba el término “idiota” para designar a aquellas personas que no se metían en política, entendiendo por “política” no la militancia partidaria sino el concepto más generoso de preocuparse  por los asuntos de la polis, por la “cosa pública”. Idiotez es entonces un concepto que nació opuesto al de ciudadanía. Ciudadanía que se ejercía metiendo la nariz en la política para comprometerse con los asuntos de la ciudad en la que se vivía.
    El ciudadano moderno es aquél que conoce y respeta sus obligaciones. Pero también aquél que conoce y hace valer sus derechos.
    Un caso típico de desconocimiento de los derechos del ciudadano se verifica en la retención indebida de un vehículo (automóvil, moto, etc.) ante infracciones que no lo ameritan.
    Misiones ha adherido a la Ley Nacional de Tránsito, la ley número 24.449, sancionada en diciembre de 1994.
     Al respecto la ley establece claramente en que circunstancias puede ser retenido tanto el conductor, como su licencia de conducir como el vehículo.
  
ARTICULO 72.-RETENCION PREVENTIVA. La autoridad de comprobación o aplicación debe retener, dando inmediato conocimiento a la autoridad de juzgamiento:
a) A los conductores cuando:
1. Sean sorprendidos in-fraganti en estado de intoxicación alcohólica, estupefacientes u otra sustancia que disminuya las condiciones psicofísicas normales o en su defecto ante la presunción de alguno de los estados anteriormente enumerados, se requiere al tiempo de la retención, comprobante médico o de dispositivo aprobado que acredite tal estado, por el tiempo necesario para recuperar el estado normal. Esta retención no deberá exceder de doce horas;
2. Fuguen habiendo participado en un accidente o habiendo cometido alguna de las infracciones descriptas en el Artículo 86, por el tiempo necesario para labrar las actuaciones policiales correspondientes; el que no podrá exceder el tiempo establecido en el apartado anterior.

b) A las licencias habilitantes, cuando:
1. Estuvieren vencidas;
2. Hubieren caducado por cambio de datos no denunciados oportunamente;
3. No se ajusten a los límites de edad correspondientes;
4. Hayan sido adulteradas o surja una evidente violación a los requisitos exigidos en esta ley;
5. Sea evidente la disminución de las condiciones psicofísicas del titular, con relación a la exigible al serle otorgada, excepto a los discapacitados debidamente habilitados, debiéndose proceder conforme el ARTICULO 19;
6. El titular se encuentre inhabilitado o suspendido para conducir;
 
c) A los vehículos cuando:
1. Que no cumplan con las exigencias de seguridad reglamentaria, labrando un acta provisional, la que, salvo en los casos de vehículos afectados al transporte por automotor de pasajeros o carga, presentada dentro de los tres días ante la autoridad competente, acreditando haber subsanado la falta, quedará anulada. El incumplimiento del procedimiento precedente convertirá el acta en defentiva.
La retención durará el tiempo necesario para labrar el acta excepto si el requisito faltante es tal que pone en peligro cierto la seguridad del tránsito o implique inobservancia de las condiciones de ejecución que para los servicios de transporte por automotor de pasajeros o de carga, establece la autoridad competente.
En tales casos la retención durará hasta que se repare el defecto o se regularicen las condiciones de ejecución del servicio indicado
2. Si son conducidos por personas no habilitadas para el tipo de vehículos que conducen, inhabilitadas, con habilitación suspendida o que no cumplan con las edades reglamentarias para cada tipo de vehículo.
En tal caso, luego de labrada el acta, el vehículo podrá ser liberado bajo la conducción de otra persona habilitada, caso contrario el vehículo será removido y remitido a los depósitos que indique la autoridad de comprobación donde será entregado a quienes acrediten su propiedad o tenencia legítima, previo pago de los gastos que haya demandado el traslado.
3. Cuando se comprobare que estuviere o circulare excedido en peso o en sus dimensiones o en infracción a la normativa vigente sobre transporte de carga en general o de sustancias peligrosas, ordenando la desafectación y verificación técnica del vehículo utilizado en la comisión de la falta.
4. Cuando estén prestando un servicio de transporte de pasajeros o de carga, careciendo del permiso, autorización, concesión, habilitación o inscripción exigidos o en excesos de los mismos, sin perjuicio de la sanción pertinente, la autoridad de aplicación dispondrá la paralización preventiva del servicio en infracción, en el tiempo y lugar de verificación, ordenando la desafectación e inspección técnica del vehículo utilizado en la comisión de la
falta, siendo responsable el transportista transgresor respecto de los pasajeros y terceros damnificados.
5. Que estando mal estacionados obstruyan la circulación o la visibilidad, los que ocupen lugares destinados a vehículos de emergencias o de servicio público de pasajeros; los abandonados en la vía pública y los que por haber sufrido deterioros no pueden circular y no fueren reparados o retirados de inmediato, serán remitidos a depósitos que indique la autoridad de comprobación, donde serán entregados a quienes acrediten la propiedad o tenencia, fijando la reglamentación el plazo máximo de permanencia y el destino a darles una vez vencido el mismo. Los gastos que demande el procedimiento serán con cargo a los propietarios y abonados previo a su retiro.
6. Que transporten valores bancarios o postales por el tiempo necesario para su acreditación y el labrado del acta respectiva si así correspondiera debiendo subsanar las deficiencias detectadas en el lugar de destino y por el tiempo necesario para labrar el acta de comprobación y aclarar las anomalías constatadas.

e) A la documentación de los vehículos particulares, de transporte de pasajeros público o privado o de carga, cuando:
1. No cumpla con los requisitos exigidos por la normativa vigente
2. Esté adulterada o no haya verosimilitud entre lo declarado en la reglamentación y las condiciones fácticas verificadas.
3. Se infrinjan normas referidas especialmente a la circulación de los mismos o su habilitación.
4. Cuando estén prestando un servicio de transporte por automotor de pasajeros careciendo de permiso, autorización, concesión, habilitación o inscripción exigidos en la normativa vigente sin perjuicio de la sanción pertinente.


     Prestar mucha atención a los casos tipificados claramente en la ley como los únicos en los que un vehículo puede ser retenido.
  Para ser ciudadanos.
  No idiotas…

Nota: agradecemos el asesoramiento jurídico de los Doctores:
-Flosi, Orlando Luis
-Bondar, Roberto

martes, 7 de mayo de 2013

CUANDO RINDFLEISCH TAMBIEN DIJO: “ME QUIERO IR”

                             




     Buenos Aires. Jueves 25 de abril de 2013. Hernán Lorenzino,  ministro de Economía de la Nación,  queda descolocado ante Eleni Varvitsiotis, una periodista griega de Skai TV que lo consulta por la inflación en la Argentina. Acostumbrado a los reportajes “a la carta” de los periodistas obsecuentes de su país el funcionario, arruga cual papel crepe y cae en el “sincericidio”: “Me quiero ir”, expresa pidiendo clemencia y se entroniza en la historia universal del ridículo.

     Oberá. Otro jueves pero un 9 de junio de 2011. Ewaldo Rindfleisch , Intendente local y por entonces candidato a un tercer mandato, queda descolocado ante Walter Anestiades, periodista medio griego de FM Oxígeno y Misiones Cuatro que lo consulta por la distribución que el Estado municipal hace de la pauta oficial. Acostumbrado-muy-a los reportajes “a la carta” de los periodistas que lo tienen blindado, ante la inusual incomodidad  la tira al córner: “No vine a debatir con vos”, fue su manera singular de también expresar: “Me quiero ir”.

     Patético pero es parte irrefutable de la realidad. Los funcionarios públicos de la Argentina de hoy se han rodeado  por tanto tiempo de “ponemicrófonos”  que una pregunta sencilla puede cobrar la contundencia de un  uppercut y dejarlos  KOT en el primer round. Muchos no lo entendieron en el 2009 pero tal vez lo comprendan ahora: fue para cubrirse de eventualidades como éstas que se ideó la “Ley de Medios de Comunicación Audiovisual”. Un engendro que ni siquiera sirve para que los ciudadanos sepan cómo y con que criterio los gobiernos distribuyen su dinero (el de los ciudadanos)  en los medios de comunicación. En Misiones, tal como nos confesó en diciembre en FM Oxígeno Myriam Duarte (Coordinadora del AFSCA, el ente que regula a los medios audiovisuales en el país incluyendo la  provincia), la ley ni siquiera sirve para democratizar “Canal 12”, un medio público en dónde podría llegar a verse a Ramón Díaz con la camiseta de Boca antes que una entrevista a un opositor.

     Estos muchachos  precisan dos tipos de impunidades: la judicial y la  mediática. La judicial para servirse del Estado sin rendir cuentas. La mediática para controlar el relato de lo que hacen y como te llega a vos. No es difícil incorporar entonces los motivos que los llevan a reformar la Justicia y los llevaron a meterse con los Medios.

     Hacía frío en esa tarde-noche en Oberá.  Sin embargo el auditorio de la Facultad de Ingeniería estaba tan colmado que generaba un calorcito muy agradable. Por iniciativa del “Círculo de periodistas”  (un colectivo al que Rindfleisch le debe tanto) se organizó una reunión con todos los candidatos a alcalde de la ciudad. Menos que en 2007 (cuando se presentaron más de cincuenta) pero siendo también unos cuántos (alrededor de veinte) allí estaban Eduardo Morales Lezica ,  Betina Escobar, Julio Boher , Vladimir Pérez , Oscar Prevosti , Carlos Fernández , Roberto “Nene” Vega, Alicia Guzmán , Hernán Ferro,  Roberto Bondar , Alejandro Etcheberger, Rubén Villordo , Ramón Ayala, Ninfa  Solmoirago  y “Tito”. Rindfleisch.  Faltaron dos o tres candidatos.
     Cada periodista presente podía preguntar una vez-dos si se completaba la ronda con todos-a un candidato elegido azarosamente. ¿Cómo fue que coincidió el turno de éste periodista para preguntar con el del intendente para responder?  Vaya uno a saber pero quizás se deba a que sí hay un Dios.

     Encarcelada la repregunta (herramienta básica del periodista que en Oberá es tan exótica como ver a River levantando una Copa Libertadores en Brasil), no hubo mucho márgen como para que los presentes sacaran data trascendente de la exposición. Pero a Rindfleisch la repregunta se la hicimos igual, dejándole en claro a todos que no puede explicar casi nada de lo que debería explicar. Todo a pesar de Nora Salinas, la moderadora del encuentro que al obstinarse  en proteger al alcalde, periodísticamente, se quemó a lo bonzo.  En unos días se cumplirán un par de años ya de esa noche.

     La mentira, para sostenerse, necesita en su estrategia la complicidad mediática. Tácticamente, hay que presentarse ante tipos y tipas que siempre son oficialistas y que no tienen la culpa si cambian los gobiernos. Los que garantizan que algunas preguntas lleguen con determinados filtros y otras no lleguen nunca. Que a algunos temas “se los deje ahí” como decía el inefable Bernardo Neustadt.  Luego, la falta de memoria y la pereza mental, mayoritarias ambas en la sociedad de éstos días completa el combo que es f-u-n-d-a-m-e-n-t-a-l  para organizar un Poder omnímodo. 
     Para todo lo demás, cuando la mentira pierde el equilibrio, está el silencio.
      Que como decía don Miguel de Unamuno, ese silencio, a veces,  es la peor de las mentiras.




    



  

EL "FRACASO" DE LA CONCIENTIZACION VIAL

   
 

     Todos los días miles y miles de argentinos se equivocan al pisar el pedal. En sus autos pisan el del acelerador. En sus mentes pisan el del freno.

      Podríamos comenzar citando estadísticas que rápidamente serían refutadas por esa clase de funcionarios públicos que dedican casi toda su energía a cambiar el relato de las cosas que pasan más que a cambiar las cosas que pasan. Pero como solemos mandar al carajo a ésos tipos  las vamos a citar igual. “Luchemos por la vida” es una ONG (Organización No Gubernamental), y éso es lo que la torna confiable. En junio se cumplirán veintitrés años de que fuera parida en Buenos Aires a favor de intentar prevenir los accidentes de tránsito en todo el país. Vale detenerse en que prevenir es una suerte de palabra subversiva en una Argentina en la que las políticas públicas suelen tener la misma seriedad que un programa de Benny Hill y la misma continuidad de un Director Técnico de fútbol.  Según ésta Asociación Civil en todo el 2012 murieron 7.485 personas por accidentes viales de norte a sur y de este a oeste de la Argentina. Un promedio mensual de 624. Un promedio diario de 21. Una persona muere por casi cada hora del día,  cada día.
    
     En Misiones, el año pasado, hubo 368 muertes por accidentes viales colocando al distrito en el cuarto con más víctimas fatales (sólo superado por la Provincia de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe). Un promedio de 30 muertos al mes, ergo, uno por día.

 ESTADISTICA DE VICTIMAS FATALES POR ACCIDENTES DE TRANSITO  EN LOS ULTIMOS DIECISIETE AÑOS: (entre paréntesis la ubicación de Misiones en la estadística nacional de cada año entre los 24 distritos)

AÑO        EN               PROMEDIO          EN               
              EL PAIS         POR DIA          MISIONES
1996      7864                   22                        285 (6º)         
1997      8123                   22                        225 (7º)
1998      7579                   21                        247 (8º)
1999      7533                   21                        263 (8º)
2000      7545                   21                        254 (7º)
2001      7071                   20                        252 (7º)
2002      6806                   19                        258 (6º)
2003      7055                   20                        238 (6º)
2004      7137                   20                        239 (6º)
2005      7138                   20                        230 (8º)
2006      7557                   21                        308 (5º)
2007      8104                   22                        334 (6º)
2008      8205                   22                        331 (6º)
2009      7885                   22                        317 (6º)
2010      7659                   21                        339 (5º)
2011      7517                   21                        314 (6º)
2012      7485                   21                        368 (4º)


    
    Cómo se aprecia fácilmente no hubo cambios sustantivos en la última década en la que , en el orden nacional, siguen falleciendo veinte personas o más en el promedio diario. En Misiones hay un salto considerable entre el 2005 (con 230 muertes y un octavo puesto en el total del país) y 2006 (donde se llega a las tres centenas de víctimas para, desde entonces, nunca volver a las dos). En los últimos años Misiones ha tenido mayor cantidad de muertes por accidentes viales que geografías con mayor población (como Mendoza o la propia Capital Federal).


     En éstos años las campañas de concientización se multiplicaron y se hicieron más visibles (uso del cinturón de seguridad, uso del casco cuando se viaja en moto, el respeto a las velocidades máximas y mínimas, los cursos viales, etc, etc, etc.) pero a la vez cabe preguntarse si la cantidad de información dada ha sido equivalente con la calidad de información recibida. Dicho de un modo más concreto: hay una diferencia fundamental entre la educación y la concientización. El objetivo de la educación  es proporcionar un conjunto de conocimientos, mientras que la concientización está dirigida a conseguir que la gente cambie su comportamiento.

    Conocer y educarse no es suficiente para modificar conductas, el gran objetivo de toda campaña de concientización. Al tiempo debemos sincerarnos: los controles y las medidas que se implementan desde el Estado tienen poco de pedagógicas y mucho de recaudatorias.

     El factor humano (ergo, nosotros) tiene el mayor porcentaje en la responsabilidad de los siniestros viales. De modo tal que el mensaje debería  ser más claro aún: campañas de educación  permanentes que tomen en cuenta la variedad de disciplinas de las ciencias sociales que pueden aportar mucho a la “llegada” del mensaje a los conductores (porque está claro que a buena parte de los videos, folletería y boletines que circulan se les da poco o nada de bolilla) . Un Estado que vea en la prevención de accidentes la maravillosa oportunidad de salvar vidas y no otra “caja”. Y la necesaria “represión” (palabra que la cultura oficial ha logrado instalar como una  rémora de las dictaduras militares, lo que deriva en el miedo a usarla) para que el miedo a la violación de las normas viales (cuando se sabe que el castigo se aplica universal  e inflexiblemente) transforma a muchos argentinos irresponsables en nuestras rutas, en ciudadanos  cuidadosos en cuánto cruzan algunas fronteras (Brasil es un ejemplo contundente). Hay que impactar en  la mente de automovilistas para que asuman que no tienen la “muñeca”  de Sebastian Vettel  o Carlitos Okulovich. Y en la de motociclistas para que comprendan de una buena vez que no usar casco o llevar un bebé a bordo es todo un anticipo del infierno. Hacer cumplir con un rigor que no se aplica nunca la obligación de usar cinturón de seguridad (¿quién lo usa cuándo maneja por la ciudad?) . Y el no hablar por celular mientras se maneja (¿conocés a mucha gente que haya sido multado por hacerlo?).  Poner el guiño cuándo se dobla. Asumir que no es lo mismo conducir en los caminos vecinales o en las colonias que en una ciudad como Oberá (por ejemplo) donde el parque automotor y la congestión del tránsito en las “horas pico” en su centro ha crecido sustancialmente. Y combatir al alcohol (vedette de los “accidentes” viales) tanto como se combate al tabaco y sin hipocresías (las etiquetas de los paquetes de cigarrillos traen imágenes y leyendas contundentes sobre los perjuicios que trae el fumar. Debería hacerse lo mismo con las etiquetas de vinos, whisky y cervezas con imágenes de, por ejemplo, como queda un hígado cirrósico)

   Cada parte tendrá su excusa para gambetear responsabilidades (deporte que nos encanta practicar). El Estado remarcará que hace escuela y prevención todo el tiempo, que “admite” que falta mucho por hacer (sanata  que sirve para expiar culpas)  y que no se persiguen fines recaudatorios. Los conductores dirán que las rutas o las calles son imposibles. Los peatones que siempre son víctimas de automovilistas inescrupulosos y que caminan y cruzan calles por donde deben. Típica “argentinización”: Si todos hacen todo bien, ¿por qué sale  mal?   ¿Estaremos realmente dispuestos a hacer todo lo que hay que hacer aún sabiendo que la mejor campaña de prevención no garantiza un ciento por ciento de efectividad y que a algunas mejoras nosotros, los de ésta generación, ni las vamos a ver?


     ¿Conocés el origen de la palabra “idiota”? Los antiguos griegos llamaban así a aquellos habitantes de la polis que no se preocupaban por la cosa pública, por los asuntos de su ciudad. Servía para diferenciarlos de los “ciudadanos”, tipos que sí se comprometían con lo que ocurría a su alrededor.
     Cuidado con los idiotas. No sólo son indiferentes a lo que nos pasa.
      También manejan…