lunes, 9 de junio de 2025

 MANO A MANO

Hablando con el profesor Roberto Silverstone recordábamos cuando por radio contábamos lo sustantivo que resulta para un señor feudal consolidar su hegemonía armando la oposición que le conviene. De modo tal que si gana, triunfa, y si pierde, también gana. El domingo 8 de junio La Libertad Avanza hizo una buena elección en Misiones, fue segunda fuerza en su debut y consiguió meter cinco diputados provinciales. Con todo eso una Defensoría del Pueblo de Oberá no se le niega a nadie.
Está a la vista la alianza que libertarios y roviristas tienen en el Congreso y que el gobierno de Milei niega porque Carlos Rovira es un aliado “vergonzante” (si uno tiene la palabra “libertad” en la boca no queda bien tejer acuerdos con un señor feudal).
A las seis de la tarde del domingo las urnas empezaron a abrirse y los votos a contarse. Dos horas después los datos eran claros: en la ciudad de Oberá La Libertad Avanza había superado al oficialismo tanto en la categoría diputados provinciales como en la categoría defensor del pueblo, siendo sus dos jóvenes candidatos, Adriana Kislo y Lucas Reguera, los más votados y en ese orden.
A las nueve la página del gobierno provincial publicó la tendencia favorable para ellos con menos de la mitad de los votos escrutados. Curiosamente en la provincia “start-up” la página cayó y tardaron dos horas en volver a publicar algo. A las diez y media el propio Rovira rompió su silencio y en una conferencia de pone-micrófonos se mostró como si hubiera arrasado en las urnas, algo que no ocurrió. Simultáneamente, en Oberá se armó un show mediático con los pauta-dependientes puestos a mostrar a la candidata del alcalde renovador Pablo Hassan como la triunfadora. ¿Qué datos tenían? Los que decía ella. Así Claudia Urrutia Braga se convirtió en la “Patricia Nittmann” de Hassan. Una “defensora del pueblo” que dejará de molestarlo con esa fastidiosa curiosidad republicana que intenta indagar en los herméticos feudos.
Adriana Kislo, la más votada de todos, hizo silencio. Lucas Reguera, el segundo más votado, deambulaba por el búnker libertario viendo las caras detrás de las caretas y con toda su honestidad intelectual a cuestas. Creciendo de golpe. La relajada fiscalización estuvo a cargo de la línea interna del presidente del partido y flamante diputado provincial electo Adrián Núñez, un personaje con mucho pasado renovador.
En los datos del tardío escrutinio oficial y provisorio, con el 99% escrutado, se observa que en Oberá La Libertad Avanza sacó 7.582 votos para diputados y 7.020 para defensores del pueblo. La renovación obtuvo 7.384 votos para diputados y mil votos más para defensores del pueblo: 8.427. Además hubo 2.860 votos en blanco para defensor del pueblo, ergo, los votos en blanco le ganaron a la ganadora Claudia Urrutia Braga, que sacó 2.523 votos.
¿Casi tres mil obereños cortaron boleta (porque diputados y defensores iban juntos) y no votaron a ningún candidato a defensor del pueblo? ¿Hubo cientos de votantes que eligieron al libertario Diego Hartfield diputado y cortaron boleta para elegir a la renovadora Claudia Urrutia defensora?
La quietud libertaria complementó bien la dinámica renovadora.
¿Buscabas oposición al feudo rovirista entre los libertarios? Mejor buscá por otro lado.
En el tango “Mano a mano” Julio Sosa canta y dice bien claro: ”Los favores recibidos creo habértelos pagado…”
No sabemos qué planes tendrá Milei para Misiones dentro de dos años, cuando se elija gobernador y se elijan intendentes.
Por ahora, diputados para vos, defensoría para mí.
Y quedamos mano a mano.
Walter Anestiades
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