¿VIVÍS EN OBERÁ? ESTOS SON LOS FUNCIONARIOS RESPONSABLES DE TU SEGURIDAD

Carlos Rovira es el señor feudal de Misiones (donde la ley máxima no es la Constitución provincial sino su voluntad) y preside el parlamento provincial hace casi tres lustros. Oscar Herrera Ahuad es el gobernador títere que el dedo rovirista señaló para este período. Marcelo Pérez es el ministro de Gobierno, área a la que le compete directamente la seguridad del territorio misionero. Pablo Hassan es el alcalde y, por ende, responsable número 1 de todo lo que pasa en la esfera de lo público. Y el comisario Rubén Duarte es el jefe de la Unidad Regional II de Policía.

Como se ha mencionado en editoriales como estos, el Poder Judicial de Misiones fue armado como un meccano por Rovira y eso afectó notoriamente sus chances de ser un adalid contra la impunidad. Como ejemplo más cercano en el tiempo, en las últimas horas el Colegio de Abogados de la provincia “instó” a la justicia a que investigue de oficio lo actuado por el ahora expresidente del IFAI, Marcelo Rodríguez (¿entendiste? El Colegio de Abogados tiene que exhortar al Poder Judicial para que haga su trabajo).

En lo nacional el gobierno kirchnerista profesa una corriente de pensamiento que considera que todo delincuente es una “víctima” del sistema capitalista, al que considera intrínsecamente corrupto. Y el responsable del ministerio de Seguridad es Aníbal Fernández. Estos dos datos determinan que la necesaria articulación tripartita entre las políticas de seguridad nacional, provincial y comunal, por el momento es imposible.

Quince años de kirchnerismo nacional y veinte años de renovación provincial y comunal han provocado que el deterioro fenomenal de la seguridad ciudadana no se pueda revertir ni en el corto ni en el mediano plazo.

Tras el asesinato de Gladis Gómez los comerciantes obereños se han movilizado exigiendo garantías para su seguridad. Es una buena movida. Pero reaccionaron tarde.

Si se va a hablar de seguridad hay que hablar con nombres propios. Porque cuando se pide justicia, ¿a quién se le pide?

El gobierno renovador paga medios y periodistas para que “despeguen” a los funcionarios políticos de la inexorable responsabilidad que tienen, en este caso, en el tema seguridad. Esos mismos medios y periodistas focalizan la demanda de seguridad en la policía. ¿Por qué? Porque la pauta publicitaria no al define la policía, sino los funcionarios políticos.

El filósofo Kant decía que “al actuar presuponemos un orden”.

En Oberá, los responsables del orden, son estos.

Walter Anestiades

Me gusta

Comentar

Compartir